La decisión de vivir en pareja no se toma de un día para otro, pues, así como trae cambios importantes en las rutinas diarias y las prioridades, también genera cambios en el manejo del dinero.  Si estás pensando en casarte o empezar a vivir con tu pareja, es importante que planeen con anticipación como van a organizar el dinero para asumir los nuevos gastos y construir en conjunto esos sueños que tienen como pareja.

¿Qué debo hacer antes de vivir o casarme con mi pareja?

1. Seguramente ya conoces los hábitos financieros de tu pareja, por ejemplo, si ahorra, en qué le gusta gastar, si suele hacer compras compulsivas o si le alcanza el dinero hasta el próximo pago; sin embargo, es necesario hablar con franqueza de los ingresos, los gastos, las deudas y los sueños que se tienen de manera individual y aquellos que se quisieran construir en pareja. No dejes que, por pereza o por miedo, se eviten estas conversaciones.
2. Cuando se vive en pareja se modifican los gastos que usualmente se tienen como solteros, por ejemplo, el pago de la vivienda, los servicios públicos y la alimentación, son rubros que podrían no tenerse antes, o al menos, no en la cantidad que se tienen cuando se vive con alguien. Por esto, también será importante que hablen, listen y calculen desde antes esos nuevos gastos que van a adquirir y a compartir.
3. Aunque no hay una receta ideal para definir cómo se van a dividir los gastos, podrían aportar por partes iguales, o decidir que quien gane un poco más aporte un poco más para el hogar, así se podrían hacer más equitativos los gastos.
4. Es muy importante dejar claro quien asumirá cada gasto, por ejemplo, mientras uno se puede encargar del pago de los servicios públicos (agua, luz y gas), el internet y el mercado, el otro se puede encargar de la cuota del arriendo y de la cuota de administración del apartamento.
   Algunas parejas prefieren juntar los aportes de dinero que cada uno hace en una sola cuenta y utilizarla como una “bolsa” para pagar todos los gastos. La decisión la deberán tomar en pareja teniendo en cuenta las ventajas y desventajas del producto financiero que escojan para reunir el dinero.

 

5. Una vez se identifican esos gastos que en delante se van a tener, se recomienda que cada uno haga un presupuesto que incluya los ingresos y los gastos tanto personales como del hogar. Conoce más sobre presupuesto aquí.

Si al momento vivir juntos se dan cuenta de que los cálculos que hicieron no corresponden a la realidad, no se preocupen, es muy común que suceda al principio, deberán conversarlo, recalcular los gastos que se tienen y redefinir los que cada uno puede asumir, finalmente, ajustar el presupuesto.

… Y los gastos iniciales:

No olvides que al momento de vivir en pareja surgen algunos gastos iniciales para facilitar la vida en convivencia, por ejemplo, una nevera para guardar los alimentos, ollas, cubiertos y platos para comer, sabanas y algún mueble que puedan requerir.  Si cada uno los puede aportar o van a vivir en una vivienda amoblada, esto no sería un problema, si no es así, se deberá ahorrar para comprarlos poco a poco, en lo posible, antes de vivir juntos.

¿Cómo manejar el ahorro en pareja?

Todos tenemos razones para ahorrar, pero cuando además tenemos claridad de los sueños o metas que se quieren alcanzar en pareja, el ahorro es fundamental.

Para ahorrar en pareja se debe establecer una cantidad de ahorro que ambos puedan manejar, así como un mecanismo para guardar esos ahorros. Por ejemplo, cada uno podría abrir un bolsillo en su cuenta bancaria y aportar mes a mes la suma acordada.

Ten presente que cuando se ahorra debajo del colchón o en una alcancía, la tentación de usarlo para otros fines es muy alta, además, cuando el dinero ahorrado no genera ninguna ganancia o rendimiento, pierde su valor en el tiempo, por ende, si pensabas que alcanzaría para pagar algo en el futuro, es posible que ese dinero ya no te alcance.

Además de ahorrar para cumplir sueños o adquirir bienes sin necesidad de acudir al crédito, también es importante ahorrar para emergencias, por ejemplo, si surge un daño en la vivienda o un electrodoméstico que consideran necesario se daña. Conoce más de ahorro aquí.

Estrategias para ahorrar en pareja:

1. Reemplacen algunas salidas a comer afuera por almuerzos en casa.
2. Preparen en casa los almuerzos para llevar al trabajo en vez de salir a restaurantes.
3. Comparen los precios de los alimentos en diferentes tiendas y escojan aquellas que les ofrecen más beneficios.
4. Cuando salgan a hacer mercado, prioricen las frutas y verduras de temporada y llevan la lista de lo que necesiten.
5. Eviten hacer mercados grandes para disminuir el riesgo de que se dañen los alimentos.
6. Planifiquen las salidas de ocio y diversión, y prioricen planes que se puedan llevar en casa.
7. Acuerden pedir las vacaciones con suficiente antelación para encontrar planes turísticos con descuento u opten por destinos locales.
8. Recuerden apagar las luces que no necesitan, utilizar la lavadora cuando la carga este completa y con agua fría y bañarse en tiempos más cortos para disminuir los pagos en las facturas de servicio públicos.
9. Prefieran la compra de electrodomésticos eficientes, es decir, que consumen menos energía, lo que se ve reflejado en las facturas de servicios públicos.
10. Prefieran hacer vueltas caminando para evitar pagos de parqueadero y gastos de gasolina.
11. Revisen las suscripciones que tienen, por ejemplo, de televisión por cable, revistas y membresías, y prioricen las que más usan.

¿Quién toma las decisiones financieras del hogar?

Independientemente de los aportes de dinero que cada uno haga para el hogar, o incluso, si uno de los dos no está aportando, se deben tomar decisiones financieras en pareja y no ceder la responsabilidad en el uso del dinero y los planes a futuro a uno de los dos.

¿Qué es la infidelidad financiera?

Es engañar a la pareja frente al uso del dinero, por ejemplo, ocultarle un gasto o una deuda o mentir sobre un ingreso.